Debut con derrota en el campeonato para San Lorenzo. El equipo de Ruben Dario Insúa cayó, justamente y dejando una mala imagen, 2 a 0 frente a Lanús con un doblete de Walter Bou.
El esquema inicial de San Lorenzo fue con tres mediocampistas (Irala, Insaurralde y Ferreira) y dos delanteros, Bareiro más centralizado y Barrios libre por todo el frente de ataque. Como consecuencia de esto, la asociación entre el Perrito y Braida, que fue lo más peligroso de San Lorenzo en la temporada pasada, no se pudo aprovechar al máximo. En la primera etapa ninguno de los dos equipos pudo generar jugadas de gol. Por su parte, el Ciclón orientó todos los ataques hacia las bandas para terminar con un centro al área, y también busco aprovechar las pelotas paradas. Lamentablemente, esto no generó tanto peligro para el Granate. En el conjunto de Boedo no hubo demasiada participación de Ferreira y Barrios, quienes son los encargados de generar juego. El primer tiempo fue bastante ordenado desde lo defensivo, pero sin mucho peligro en el último cuarto de cancha, y por eso finalizó sin goles.
Para los segundos 45’ salieron los mismos once que arrancaron. La segunda mitad fue toda del visitante que se hizo el protagonista del partido y salió a buscar la victoria. En los primeros minutos, un par de intentos por parte de Lanús empezaban a hacer figura al arquero del Ciclón. El Gallego, al ver que el equipo no reaccionaba empezó a hacer variantes, ingresaron Remedi y Tarragona, luego Cuello y por último Tapia. Ninguno de ellos pudo cambiarle la cara a un equipo que no atacaba y se mostraba cada vez más débil y cansado. A falta de cinco minutos para que el árbitro adicione, una gran jugada colectiva de Lanús iba a derivar en el primer gol del partido. El equipo azulgrana recibió el golpe y no tuvo ideas ni energías para buscar el empate sobre el final. Además, minutos más tarde, el Granate iba a sentenciar el partido para llevarse tres puntos merecidos por lo hecho en el segundo tiempo.
Un partido muy flojo de San Lorenzo, sobretodo en el segundo tiempo donde el rival lo superó notoriamente. Sin ninguna jugada clara de gol y con mucho cansancio con el pasar de los minutos, el Ciclón arrancó con el pie izquierdo la Copa de la Liga.