Ya pasaron 41 años de un grito inolvidable, cargado de pasión, sentimiento y fidelidad incomparable.
El 6 de noviembre de 1982 es una fecha que quedó marcada en todos lo hinchas de San Lorenzo y en su actual director técnico, Rubén Darío Insúa. El Gallego convertiría el penal ante El Porvenir que significaba el regreso del Ciclón a Primera División. Sólo faltaban nueve minutos para el final del encuentro, cuando el balón ingresó en el arco y se volvió una fiesta.
Aquel equipo, dirigido por José Yudica, había formado con Quiroga; Comeles, Biaín, Hugo Moreno, Héctor O. López; Quinteros, Insúa, Batalla; Héctor R. López, Jorge Rinaldi y Morel Bogado. El el árbitro del encuentro, Rubén Torres, debió suspender el partido por la invasión de la gente, a tres minutos del cierre.
La localía cuerva fue en la cancha de Vélez. El festejo ya había quedado pausado una semana antes cuando San Lorenzo empató con Deportivo Español en la Bombonera y se aseguró el primer lugar. Tuvo que esperar unos días más y ahí sí, dos fechas antes del final, se desahogó y consiguió recuperar su lugar en Primera.
En total, fueron 42 fechas, 23 triunfos, 11 empates, 8 derrotas y 8 puntos de ventaja sobre Gimnasia (ganador de la Zona A) para adueñarse del primer ascenso. En su estadía en la «B», el «Ciclón» revolucionó la divisional. Sin estadio, ya que años antes había sido demolido el Viejo Gasómetro, el público de San Lorenzo llenó todas las canchas.