Con la presencia de más de 130.000 mil hinchas y en una de las noches más frías del año, el Ciclón volvió a tomar posesión de los terrenos de Av La Plata al 1700. Shows, video emotivo y el cierre con fuegos artificiales hicieron que el 1/7 deje de ser un sueño y se convierta en realidad.
Miles de cuervos se ubicaron sobre Av. La Plata y desde muy temprano esperaron con ansias el ingreso; en el mientras tanto, y aún sin la culminación de la misa que se desarrollaba en el Oratorio San Antonio, en las adyacencias de “Tierra Santa”, los fanáticos aprovechaban para alentar, contar alguna historia y tomarse varias fotos junto a familiares, amigos y pareja.
Desde la seguridad dieron el visto bueno para abrir las vallas y el hincha se aproximó hasta los molinetes a la espera del último permiso para poder pisar las inmediaciones, en donde se podían ver varias pantallas posadas sobre la pared del edificio y dos principales para que se pudieran disfrutar los diferentes shows.
Pasadas las 21 llegó la carroza junto a grandes figuras de la historia de San Lorenzo y, por delante, a pie iban Matías Lammens y Marcelo Tinelli, una vez más acompañados por fanáticos que se hicieron presentes en México 4050.
Más de 40 años pasaron para poder tomar posesión de los terrenos y cada uno de los presentes recordaron a aquel que no está, alguna anécdota del viejo Gasómetro y hasta se abrazó con algún desconocido una vez comenzado el show.
En el evento se puedo ver un recorrido en las diferentes pantallas de la historia de San Lorenzo, además de contar con la presencia de varios cantantes e hinchas de San Lorenzo. El coro Kennedy fue el encargado de dar comienzo al evento para luego poder escuchar, entre otros, a: Vicentico y Florián (Hijo), la periodista y cantante Melina de Piano, Néstor en Bloque y el cierre estelar a cargo de Fuerza Bruta.
La celebración llegaba al fin y en el escenario principal se podía ver a los hermanos Res, Matías, Marcelo y Roberto Álvarez, quienes dieron comienzo a la cuenta regresiva, para que un segundo después se escuchara un grito, pero no un grito como aquel que podés pegar cuando te asustás, fue un grito liberador, ese que te hace dar cuenta por solo un segundo que el sueño se hizo realidad y que un 1 de julio de 2019, San Lorenzo volvió a tomar posesión de los terrenos y esta vez es para siempre.