En el regreso de Rosario, San Lorenzo entreno esta mañana en ciudad deportiva pensando en el próximo duelo frente a Vélez en el Bidegain .
No queda tiempo para relajar ni para lamentos. El equipo de Diego Monarriz llego a Buenos Aires durante la madrugada y hoy desde las 11 el plantel retomo al trabajo con la obligación de mostrar otra cara el domingo cuando enfrente a equipo de Heinze.
Es por eso que el equipo se dividió entre los que jugaron ayer en el Marcelo Bielsa, quienes realizaron ejercicios regenerativos y aquellos que no sumaron minutos, trabajaron en espacios reducidos.
Monarriz tendrá la tarea de mentalizar al equipo, junto con los referentes, de cambiar la idea de juego o mejor dicho, de poder mostrar que existe una idea.
Al momento no hubo novedades sobre la condición física de Juan Ramírez, quien dejó la cancha con una molestia en el aductor. Con el correr de los días se verá si está disponible para enfrentar al equipo de Liniers.
Finalmente el plantel mañana volverá a los entrenamientos y la prensa podrá presenciar las tareas realizadas en la cancha auxiliar del Gasómetro
No se nota mucho el trabajo que hacen, se juega horrible.