El Ciclón logró igualar ante Talleres gracias a un golazo de Nahuel Barrios en la agonía del partido. Tal como lo hizo en su debut, en el 2017 ante la Universidad Católica.
El perrito, el chiquilín de Boedo parecía que no iba a tener lugar en el equipo. Sin embargo, Pedro Troglio lo pidió, Insúa lo mantuvo, le dio lugar y hoy en día es uno de los mejores jugadores que tiene el plantel.
Muchos recordarán que Barrios se fue a préstamo en reiteradas ocasiones, muchos apostaban poco en su futuro en Boedo. A pesar de eso, calladito y con su 1.56 de altura, volvió a su casa y se ganó un lugar en el equipo titular del Gallego.
Hoy, como hace cinco años, volvió a convertirse en el salvador de Boedo. Aquella noche de abril del 2017, Aguirre lo metió e hizo su debut en la primera división. Tardó sesenta segundos en convertir su primer gol y de cabeza, gracias a él, conseguimos el pase a la siguiente ronda.
Hace pocos días, en La Cicloneta, Nahuel Barrios declaró: “Me está tocando de nuevo y quiero aprovecharlo al máximo. Tengo una revancha, y por suerte se me está dando”, realmente está demostrándolo y merece el presente que está teniendo. Hoy, el perrito fue figura gracias a cómo desplegó su juego y al sablazo que metió sobre el final para que el Ciclón rescate un punto.
TRE MEN DO 🔥
Golazo del Perrito Barrios para darle el empate a @SanLorenzo pic.twitter.com/wzk1JpfzIA
— Liga Profesional de Fútbol (@LigaAFA) July 25, 2022