Al finalizar la reunión de la Comisión Directiva que se realizó este lunes, se anunciaron las novedades de San Lorenzo para arrancar la etapa final de lo que sería la definitiva vuelta a Boedo, con estadio.
En primer lugar, el secretario Miguel Mastrosimone informó el acuerdo con el Banco Nación para firmar un contrato de fideicomiso, y así, avanzar en la construcción del futuro estadio en Avenida La Plata. Este tema estará listo para ser votado en la reunión de Comisión Directiva del miércoles de la semana que viene, cuando ya se tengan los documentos para su correspondiente evaluación final.
Esos fondos, el club no podrá utilizarlos para ninguna otra situación, al igual que el que se había creado en su momento para las compras del terreno a Carrefour. En aquella oportunidad socios, hinchas y simpatizantes lograron adquirir 27.500 metros cuadrados del inmueble sito en Avenida La Plata 1624, y en dinero fueron cerca de cien millones de pesos ($100.000.000).
El segundo punto, imprescindible para levantar los cimientos del Estadio Papa Francisco, que tendrá capacidad para 45 mil espectadores, es la demolición del tinglado en el que operaba el supermercado.
El Arquitecto Fabio de Marco, de Oficina Urbana, encargado de desarrollar el Proyecto Urbano Integral de La Vuelta a Boedo, explicó que para presentar el expediente ante la Ciudad de Buenos Aires ya están elaborados todos los planos y también está terminado el relevamiento fotográfico hecho por el escribano.
Lo que resta son los cortes de los suministros, algo que suele demorar entre 10 y 15 días aproximadamente, y una vez resuelto ese tema con la presentación del expediente, la Ciudad podría tardar entre tres y cuatro meses para otorgarle a San Lorenzo el Permiso de Demolición.
Por último, es necesario pagar un derecho de demolición, una tasa, que en octubre o noviembre del año pasado era de unos 5 millones de pesos. Mientras tanto, en forma paralela, sugirió De Marco que el club realice un llamado a licitación para dicha obra.