Triunfo en Junín y a festejar en Boedo

San Lorenzo logró conseguir su primera victoria como visitante en lo que va del 2023 y empezó a pisar fuerte en el torneo. A pesar de la victoria, el equipo tiene mucho por mejorar, especialmente en el mediocampo.

Otra tarde en la que el Ciclón no empieza con todas las luces. Lamentablemente, el primer tiempo no fue el mejor. Sin embargo, fuimos superiores a Sarmiento, aunque no tuvimos llegadas claras. Claramente dominamos el juego, pero sufrimos mucho en la mitad de la cancha. Si bien ningún jugador desentonó del todo, hubo uno que me llamó la atención: la roca Sánchez. Me parece que hoy demostró (una vez más) que es un jugador de renombre que aporta poco juego. En los primeros 45 minutos no paró a nadie, lo pasaron constantemente y dio pases insignificantes a compañeros que tenía a menos de cinco metros. Por otro lado, tampoco se cayeron muchas ideas y duele ver como el equipo retrocede constantemente: dominó hasta el área rival y al no encontrar un pase libre, vuelve hacia Batalla para volver a empezar, a ningún jugador se le ocurre romper el esquema y buscar, aunque sea una falta para continuar en ataque, por lo menos con un centro de pelota parada.

En la segunda mitad, mejoramos un poco, pero los fallos de la roca Sánchez casi nos hacen perder el partido en reiteradas ocasiones. Por suerte apareció Gattoni, que nos guste o no, lo vamos a extrañar. Si bien se ganó, es realmente preocupante como el equipo se desarma cuando logra pasar al frente. Sufrimos, pero ganamos y eso es lo importante para seguir prendidos en los puestos altos. Esto recién empieza y aun nos queda un camino muy largo.