Uno está preocupado por la situación del Covid, trata de pensar en otra cosa, pero se pone contento porque juega San Lorenzo. A lo mejor, que juegue el club de nuestros amores, a veces es contraproducente, porque los jugadores no demuestran la actitud que uno quiere y porque hoy en día pocos equipos respetan a nuestro querido San Lorenzo de Almagro. Cualquier equipo viene al Nuevo Gasómetro, nos juega de igual a igual y hasta nos gana.
A mi criterio, lo de hoy fue una catástrofe, el dolor y la angustia que siento (y calculo que sentimos todos los Cuervos) es inexplicable. Pero todo tiene algún motivo para que estemos con este estado anímico: no vemos a los Matadores, a los Camboyanos ni a los Carasucias que tienen que vestir la casaca azulgrana. Hoy perdimos un partido inexplicable, ese partido que teníamos que ganar si o si. No solo porque jugábamos de local, también porque somos SAN LORENZO. Creo que ese es el problema, el CASLA tiene una historia muy grande y hoy en día, cualquier jugador usa su gloriosa camiseta.
Hay jugadores, que evidentemente les da lo mismo jugar en un equipo grande o en un equipo chico. Siento que se equivocan todos: dirigentes, cuerpo técnico, jugadores, TODOS. Eso es algo inaudito, es algo que nos lleva a chocar con la pared una y otra vez. Esto, de una forma u otra tiene que parar. Quedamos afuera de la Copa Argentina y Copa Libertadores, estamos rezando para clasificar a la siguiente ronda de la Copa de la Liga y para rematar, empezamos perdiendo en la Copa Sudamericana. Si, la fase de grupos es larga, pero no nos olvidemos que clasifica solamente el equipo que gane el grupo y la realidad es que viendo el juego que tuvimos, estoy realmente preocupado. Esperemos que esta situación cambie lo antes posible.
“Queremos Camboyanos, queremos Matadores, queremos jugadores QUE SIENTAN LOS COLORES…San Lorenzo es un grande, QUEREMOS SER CAMPEONES”.
