Los hermanos Romero habrían intimado a San Lorenzo a saldar la deuda que el club mantiene con ellos y además, la dupla tuvo un entredicho con el resto del plantel.
Los focos del incendio siguen latentes en Boedo. Cuando parecía que las cosas se podían calmar y tendríamos un miércoles pacifico, todo se complicó un poco más. Los hermanos Romero, luego de su comunicado y versión de los hechos ( su estadía en el Ciclón),habrían intimado a San Lorenzo por el la deuda que el club mantiene e hicieron pública.
No solamente el tema se trata en los despachos de abogados y redes sociales, también hay repercusiones dentro de la cancha, precisamente en la práctica. Todo parece indicar que en Ciudad Deportiva (ayer martes) varios referentes se reunieron para hablar con Óscar y Ángel sobre el compromiso y levantar la cabeza en el torneo. En principio en buenos términos, luego habría subido el tono la charla y ya no con un semblante amigable. La relación con el plantel también se rompió.
Finalmente, hoy post entrenamiento, desde prensa se había confirmado una conferencia de prensa por parte del capitán; Ortigoza, algo que finalmente no pasará. Se había barajado la idea de que no solo sea Néstor, sino también varios jugadores del plantel. Por último, pese este contexto, los hermanos Romero fueron a entrenar normalmente y se espera por la lista de concentrados para ver si pueden jugar mañana frente a Estudiantes.