San Lorenzo de Almagro atraviesa un momento crítico tanto en lo deportivo como en lo económico. Mientras el equipo, ahora dirigido por Damián Ayude, trabaja en una nueva pretemporada, las bajas sensibles en el plantel profesional y los persistentes problemas financieros agravan la situación del club. Las salidas de Miguel Ángel Russo, Malcom Braida e Iker Muniain generaron malestar entre los hinchas, pero desde la dirigencia destacan un aspecto positivo: la liberación de contratos altos representa un alivio económico para las arcas del Ciclón.
Sin embargo, los conflictos financieros persisten. A última hora de este miércoles, se conoció una nueva demanda judicial presentada por el exjugador Gastón Campi, quien reclama al club más de un millón y medio de dólares. Campi, que tuvo un destacado primer paso por San Lorenzo —al punto de que Ruben Darío Insua pidió su renovación—, vivió un último año complicado, siendo uno de los futbolistas más resistidos por los hinchas pese a haber sido ofrecido como capitán por Leandro Romagnoli y haber marcado goles clave en 2024 contra Liverpool y Huracán. Su relación con los hinchas se deterioró, lo que lo llevó a ser uno de los primeros en abandonar el club. Actualmente, defiende los colores del Barcelona de Ecuador.
La demanda de Campi se basa en deudas acumuladas desde la dirigencia anterior, incluyendo parte de su salario y el pago correspondiente a la firma de su renovación a inicios de 2023. Este nuevo conflicto judicial se suma a las numerosas inhibiciones que enfrenta San Lorenzo, complicando aún más la posibilidad de incorporar refuerzos mientras la dirigencia azulgrana trabaja para resolver estos problemas económicos.