El actual presidente, Julio Lopardo, aclaró varias cuestiones de la vida institucional, política, futbolística y económica del club. Desde los rumores de su posible renuncia, pasando por el no levantamiento de las inhibiciones, hasta definiciones del plantel de futbol profesional que tendrá el Ciclón hasta fin de este año.
En los últimos días se barajó la posibilidad de que Julio Lopardo (quien sustituyó al presidente electo, ahora de licencia, Marcelo Moretti) pegue el portazo y renuncie a su cargo en el CASLA. Sin embargo, en dialogo con Radio La Red, TyC Sports y según pudo averiguar San Lorenzo de América, el propio Lopardo desmintió esta versión y confirmó que seguirá al mando de la institución siempre y cuando la comisión directiva esté alineada para tratar de sacar a San Lorenzo adelante. Su idea es poder terminar el actual mandato hasta diciembre de 2027 y de momento no piensa buscar una reelección mas allá de ese tiempo. A su vez, le insistió publica y personalmente al presidente en licencia Marcelo Luis Ángel Moretti que renuncie a su cargo por sus propios medios, por el bien del club.
Otra de las definiciones que se conocieron en el día de hoy fue la confirmación de que el Club Atlético San Lorenzo de Almagro no levantará la totalidad de las inhibiciones que perjudican al club en el corto plazo y, por consecuente, el plantel de primera división del futbol profesional no verá caras nuevas para este segundo semestre del año. Convirtiéndose así en el único club de los 30 equipos de primera que no contratará futbolistas en este periodo de transferencias. La única inhibición que levantó el Ciclón fue la de $1.000 francos suizos (que ronda el millón y medio de pesos) a FIFA por cargos administrativos. La deuda más grande que hoy tiene la institución es de 7 millones de dólares con la financiera suiza por el pase vendido de Adolfo Gaich en 2020. Incluso, esta deuda puede desencadenar en un pedido formal de quiebra por parte del fondo contra el club. ¿El resto de las inhibiciones? Se irán abonando con el correr de los meses de acá a diciembre. Con esta medida se busca ganar aún más tiempo para ir juntando el dinero necesario y poder, en el mientras tanto, seguir afrontando las obligaciones diarias que el CASLA tiene como club.
En relación a esto último, la idea de la dirigencia azulgrana es no desprenderse de ningún futbolista más (ya se fueron Muniain, Braida e Irala y rescindieron Peralta y Sabella) a menos que algún equipo venga y ejecute la cláusula de salida lo que supondría un elevado e inmediato monto de dinero que ingresaría a las arcas del club. De hecho, Lopardo reconoció que Boca Juniors se contactó para ofertar por el actual capitán azulgrana Gastón Hernández, pero la postura fue no negociarlo por menos que su cláusula de recisión que está valuada en 10 millones de dólares netos. La única “cara nueva” que tendrá el plantel comandado por Damián Ayude será la del delantero colombiano Diego Herazo quien a fin de este mes de julio termina su contrato con Nacional de Uruguay y regresará a CASLA para ser tenido en cuenta por el cuerpo técnico azulgrana y ser una opción más en el ataque del Ciclón de cara al torneo clausura y la Copa Argentina 2025.