San Lorenzo recibió a Platense por la semifinal del Torneo Apertura. El partido terminó en triunfo calamar por 1 a 0 con gol de Zapiola; y jugará la final con Huracán.
Para el inicio del partido, Miguel Ángel Russo puso en el campo de juego a: Orlando Gill; Ezequiel Herrera, Jhohan Romaña, Gastón Hernández, Elías Báez; Nicolás Tripichio, Ezequiel Perruzzi; Ezequiel Cerutti, Iker Muniain, Malcom Braida; y Andrés Vombergar. En los primeros minutos ambos equipos jugaban a presionar y apoderarse del balón, que se disputaba en la mitad de la cancha. Las situaciones de peligro fueron escasas y sólo se repartían pelotazos para intentar sorprender en un ataque. A los 18 minutos el técnico azulgrana hizo el primera cambio de la tarde con la salida de Cerutti, desconsolado por una lesión, y el ingreso de Matías Reali en su lugar. A los 20 Muniain ejecutó un tiro libre de derecha, que terminó en las manos de Juan Pablo Cozzani. En la jugada siguiente, Reali desbordó por la derecha y sorprendió con un centro desde el lateral del área, que pudo retener el arquero calamar. La primera jugada clara para la visita fue a los 25 minutos con un centro a partir de un tiro de esquina, y un puntapié leve que atajó Gill. De ida y vueltas, tanto San Lorenzo como Platense se acercaron a las áreas rivales para abrir el marcador, pero las faltas y fricciones interrumpían el encuentro. En el cierre de la primera etapa, Braida ingresó al área con la pelota y cuando estaba por cerrar la jugada, fue despejada por un rival.
Para la segunda parte, Russo no hizo ningún cambio desde el vestuario. San Lorenzo salió con el ímpetu necesario para abrir el marcador, pero se encontró con un rival que no le permitía generar espacios. A los 10 minutos, Platense tuvo una clara llegas con una jugada colectiva que terminó con un desborde por la izquierda de Taborda, sin embargo Romaña, desvió el balón al tiro de esquina. Cuando el reloj marcó el minuto, Muniain acomodó la pelota para una jugada de pelota parada, el centro llegó al área pero luego de varios rebotes, terminó en los pies del rival. El partido, de ida y vuelta, permitió la creación de situaciones riesgosas. A los 27 a partir de un tiro de esquina, Zapiola, que evadió la marca Romaña, convirtió el primer gol de la noche. El Ciclón, siguió atacando, y sin dudas era momento de hacer cambios, salió Tripichio y entró Alexis Cuello, en la búsqueda del empate. San Lorenzo generó algunas llegadas más pero no estuvo preciso en la definición. Por su parte Platense, modificó su planteo para ser más defensivo, y provocó varias infracciones que no fueron sancionadas de manera correcta. En la última jugada Muniain, ejecutó un tiro libre que luego de un rebote terminó en tiro de esquina, pero el árbitro cobró saque de arco y pitó el final del partido. Platense pasó a la final.