Gill se lució en el debut del Ciclón

San Lorenzo logró una victoria vital por 1-0 sobre Talleres en el arranque de la Zona B del Torneo Apertura de la Liga Profesional. El equipo de Miguel Ángel Russo, que no contó con el lesionado Iker Muniain, consiguió un importante triunfo en el Nuevo Gasómetro, que tuvo a Orlando Gill como figura excluyente bajo los tres palos.

En una primera mitad llena de ocasiones claras, los dos equipos se empujaron en busca de la apertura del marcador. Pero el arquero de San Lorenzo, Orlando Gill, demostró su gran momento y fue clave para que el cero se mantuviera. A los 15 minutos, tras un preciso cabezazo de Gastón Benavídez, Gill voló y atrapó el balón de forma impecable. Pocos minutos después, Ezequiel Cerutti también tuvo una oportunidad clara para el Ciclón, pero su disparo débil fue bien contenido por el arquero del equipo cordobés, Guido Herrera.

Talleres no se quedó atrás y lo siguió intentando. A los 28’, Rubén Botta sacó un potente disparo que Gill desvió con reflejos felinos. El rebote cayó en los pies de Matías Galarza, quien solo frente al arco la mandó por encima del travesaño. La última chance del primer tiempo fue para Sebastián Palacios, quien también chocó con la muralla de Gill.

El arquero azulgrana tuvo una destacada actuación en el Bajo Flores. (Créditos fotos: RS Fotos).

Ya en la segunda mitad, la presión de Talleres no cesó. A los 3 minutos, Camilo Portilla lanzó un misil que rozó el palo derecho de Gill. En la jugada siguiente, Nahuel Bustos disparó con firmeza y el arquero de San Lorenzo respondió con un manotazo sensacional, manteniendo el arco en cero.

A pesar del dominio visitante, San Lorenzo encontró el gol casi en el ocaso del encuentro. Andrés Vombergar aprovechó un buen pase y, desde la medialuna, la clavó contra el caño derecho de Guido Herrera para desatar la algarabía del Nuevo Gasómetro. Talleres, que lo intentó hasta el final, no logró vulnerar a Gill, quien estuvo imbatible a lo largo de todo el encuentro. De esta manera, el Ciclón se quedó con los tres puntos en un partido que podría haber terminado en empate.

El arquero Orlando Gill demostró por qué es uno de los grandes responsables de este triunfazo, con intervenciones que evitaron que Talleres se adelantara en el marcador y terminaron siendo determinantes en el desarrollo del encuentro.

(Créditos fotos: RS Fotos).