San Lorenzo abrochó su segunda victoria del año en el Bidegain con claridad sobre Platense y varias individuales en nivel alto.
Lento y previsible hasta los 15’, moviendo la pelota sin salteos, sin toques de primera y de pronto… GOL DE HERNÁNDEZ! No había pasado nada hasta el momento y se cumplió aquello de “dos cabezazos en el área es gol”, a la salida de un córner. Ahí nomás, el primer aviso de Platense fue con una buena jugada en que la defensa llegó tarde a todas las marcas y Zárate tiró por arriba. Lo mejor de San Lorenzo se vio por arriba: con la que detuvo Bareiro increíblemente y la que, acto seguido, le tapan aún más increíblemente. De abajo, la conexión Férnandez Mercau y Barrios se hizo ancha en la banda izquierda; lo más interesante y amenazante con la pelota al piso. Chispazos de Cerutti (bien en el centro del gol), el laburo de Bareiro fajándose (gana el primer cabezazo en el tanto de Hernández) y las gambetas del Perrito.
Hasta los 12’ del segundo tiempo San Lorenzo miró el partido y volvió, entonces, a disputar la tenencia de la pelota y querer hacerse dueño del partido, para no retroceder en el campo. Igual la postura en la cancha y los cambios del técnico fueron más para planchar el partido que para ir a rematarlo (Giay por Marta y Maroni por Perro, los primeros dos). Se filtraron Maroni, Bareiro y hasta amagó Giay cuando Platense se adelantó un poco y dejó espacios. Y Cerutti, de penal, tuvo premio tras la gran escalada de Gattoni: muy buena triangulación con Cerutti y Elías, luego de que Giay entendiera que de zurda la iba a rifar. Pasaron los minutos y las entradas del lateral juvenil y el ex Boca se acomodaron bien al partido.
Platense no pareció un rival fuerte para los puntos que ostenta en la tabla, pero San Lorenzo tuvo mérito en eso. Importante meter el segundo triunfo en casa, con el arco cerrado y un detalle: los dos goles con mérito de dos de los centrales, Hernández y Gattoni. A seguir sumando con el compromiso que hoy mostró el equipo.