El domingo San Lorenzo jugará su último partido del torneo a las 5 de la tarde contra Newell’s para cerrar una campaña paupérrima.
Monarriz te puede caer mejor o peor pero puso la cara en el desastre que le dieron. No salió a todas las conferencias, es cierto, pero como la Liga Profesional es bien argentina, nada lo obliga a hacerlo. Pensé que iba a ocurrir un mejor cambio en la sociedad con Camello, pero ahí están los números y esas titularidades que no se entienden y que tampoco tienen relevos.
San Lorenzo tiene un récord de visitante que es una vergüenza: ganó un solo partido en un torneo de 25 fechas y eso ya no se modifica. Puesto en números, de los 39 puntos posibles, sacó 7 por ganarle a Boca y empatar en 4 oportunidades. Esta mirada ya incluye el trabajo de Montero.

Pero con la lupa sobre la dupla de la recta final, las cifras no han mejorado mucho. Y tampoco jugaron mucho más los juveniles que fueron dirigidos tanto tiempo por Monarriz. Van 7 partidos con 2 triunfos, 1 empate y 4 derrotas; 33% de puntos ganados, una miseria. Y lo otro que suena raro es la idea instalada que indica que Monarriz sale del club después de agarrar el fierro caliente. Sin información extra y visto desde afuera parece de lo más extraño. Y se decía antes de comenzar el interinato, porque no va a faltar el buen tipo que diga que fue por los malos resultados.
Domingo, 17 horas, estadio Pedro Bidegain, se acaba este martirio que fue San Lorenzo en 2021.